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EL CISNE DE PAPÁ (cuento)

Cuento del cisne de papá. Cuando tu papá era chico, muy chico aún, le regalaron un pollito amarillo, su primer plumaje. Se lo pusieron en sus pequeñas manos que temblorosas lo acogieron  y el pollito se acurrucó en ellas, se refugió de su miedo y al rato estaba dormido. Papá lo mantuvo un rato tranquilo y le intentó dar de comer. Prometió hacerse cargo de sus cuidados y nos lo  llevamos a casa. Una vez allí le dimos su espacio, fuera de la habitación porque no era un peluche. Los tres primeros días presiento que fueron un tormento para el pollito que ya tenía su nombre propio “pollito”; a todas horas lo cogía para introducirlo en sus juegos, lo colocaba en sus castillos, no mezclaba con los peluches, le hacía interactuar con los Playmobil, etc. Los abuelos le fueron enseñando a cuidarlo, a dejarlo vivir y que creciera, que más adelante podría jugar con el pollito, cuando éste se hiciera un poco mas grande  y más fuerte. “Pollito fue relegado a su espacio; cuidado,  alimentado y mir
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No estoy muerta, estoy callada

Desde mediados de febrero mi hijo, que vive en Estados Unidos, empezó a recibir mensajes de personas desconocidas, dándole el pésame por mi muerte.  Pensamos que podría tratarse de una broma macabra y le pedí que me enviara los mensajes; entre los remitentes reconocí a algún ex compañero de Partido. Me resultan despreciables este tipo de bromas agresivas y pensé en escribirles algo. Al cesar los mensajes se calmó mi rabia. Hace unos días me encontré con uno de ellos en la terraza de un bar y fue una escena alucinante. Esa persona me consideraba muerta, había escrito un mensaje precioso a mi hijo sobre su afecto hacia mí, su reconocimiento y había lamentado mi pérdida y se lo comentó a otros compañeros del Partido. Cuando se acercó a mí me dijo: «perdone señora que la mire tanto, es que se parece usted muchísimo a una amiga mía que ha fallecido, se llamaba Carmela». Cuando me quité la mascarilla casi se cae al suelo, se llevó una gran sorpresa, imaginaros, yo resucitada. Me dijo

Fracaso escolar

Fracaso escolar En mi caso mejor diría que soy «un fracaso del sistema educativo español»,  porque mi infancia transcurrió en una etapa oscura de la historia de España; me refiero a los años posteriores a la Guerra Civil, cuando el golpe de estado franquista arrasó los avances sociales, sobre todo en materia de educación, que se habían logrado durante la Segunda República. Yo mandaría al fuego eterno a todos los ministros de educación que durante décadas adoctrinaron a la infancia, con dogmas y consignas de corte fascista. Que el sistema fracasara conmigo es algo de lo que a partir de un momento dado pude alegrarme. No fui instruida; como consecuencia tampoco adoctrinada. Los maestros y profesores pasaban de mí. No recuerdo a ninguno que me prestara la más mínima atención si no era para reprenderme. La peor experiencia que recuerdo es el curso que estuve en un colegio de monjas, la Compañía de María, con menos de ocho años; recuerdo castigos humillantes y palabras de desprecio hacia

Nada que celebrar

28 F, DÍA DE ANDALUCÍA Nada que celebrar, la lucha continúa. En otros tiempos un día como hoy lo celebraba por todo lo alto. Los días previos los vivía con mucha excitación. Me reunía con compañeros y compañeras del partido en el que militaba, el PSOE, para organizar eventos por doquier.  La actividad era frenética porque se trataba de procurar la presencia en los actos de los líderes destacados, coordinar sus agendas y siempre previsto un plan B, pues bastantes de ellos tenían más compromisos que atender y podían fallar a última hora.  Los carteles, los eslogan, pegatinas, y demás objetos publicitarios eran cuidadosamente elegidos. “Por derecho”, “Andalucía nuestra”, son los que más impacto hicieron al principio. Miles de banderas blancas y verdes expuestas en balcones y farolas.  Era una fiesta en la que celebrábamos las conquistas del pueblo andaluz, su lucha para salir de la postración a la que estábamos sometidos por un régimen fascista. Cada año un pasito más…. Y sin apenas haber

El Cuento del «Día de la Abuela»

En mi última visita a mi nieto, para argumentar el motivo por el que organicé un día a solas con él, me inventé «una tradición»; cosa que respetan mucho en la familia materna. Les dije que nosotras, las abuelas españolas que vivimos con libertad y autonomía, dedicamos un día al año a los nietos; desde el desayuno en un local público hasta dejarlos en su cama a dormir. Cuando son pequeños les acompaña el hijo o hija de la abuela; cuando son mayorcitos no. Más tarde depende de la relación que tengamos con ellos. Las actividades del día se programan con antelación, atendiendo a los deseos y motivaciones que van diciendo los nietos.  (Casi siempre se  incluye visitar un «paraíso de juguetes», con objeto de hacerles un buen regalo, cumplir sus deseos.) A nuestros nietos dedicamos todo el día, pero los cuidan  y atienden sus necesidades sus progenitores, nosotras solo queremos disfrutar con ellos y dedicarles todo el amor que nos queda. Los nietos, después de flipar un día entero, vuelven a

Cartas de la Abuela

Ayan con dos años Os agradezco la acogida que habéis brindado a los albumenes de fotos, editados en Faceboock, en los que dedico textos a Ayan (*) y las sugerentes ideas que me aportáis que, francamente, me animan a seguir. Os dejo los siguientes enlaces, de los albumen que ha han sido editados en papel. En simpáticos libros de tapa dura con todos los contenidos, incluidos "me gusta" y comentarios vuestros. Álbum num 01 (desde 0 años ) Á lbum 02 (viaje a USA) Álbum 03 (después de conocernos) Ál bum 04 (otra vez en NYC ) Álbum 05 (A partir de un año) Sigo editando en Faceboock periodicamente. 

Pensando en ellos....

Los hombres, en general, no se dan cuenta de que el patriarcado les fulmina el cerebro. Les hace creer cosas insostenibles y vivir constantemente con desazón. La mayoría son tan víctimas como las propias mujeres, a las que ven bajo el prisma de "la primacía masculina", y se ven obligados a "representarse"  conforme al "modelo alfa" que los hombres se han formado de sí mismos. Visto desde fuera, desde mi perspectiva, por lo que cuentan y las historias que llegan a mis oídos, hay muchos "fracasados" en el sistema y al parecer necesitan bastante ayuda porque los cambios que están acaeciendo en las relaciones hombre-mujer les deprimen y culpan a los demás, sobre todo a LAS demás, de su propio abandono, sin darse ni cuenta que eso les pasa porque es el propio "sistema patriarcal" quien los rechaza. A todos mis amigos se lo digo: "deja salir de tu cabeza la basura con la que te han contaminado y súmate  al nuevo paradigma" y s