Marzo me ha resultado extraño

¡Vaya mesecito de marzo que hemos pasado! 

Desde hace tiempo se vienen agrupando en torno al día ocho de marzo todas las actividades conmemorativas del "Día Internacional de la Mujer", dándose la circunstancia de que este año ha coincidido en Andalucia con las Elecciones al Parlamento Andaluz, lo que hace que estos actos, o bien hayan pasado desapercibidos fuera de sus propios entornos, o que hayan sido legitimamente incorporados a las campañas de los partidos políticos que se han presentado a los comicios.


Todos quieren que sepamos que nos tienen en cuenta.

 

Foto de: Analys Lozano


También tenemos la contrariedad de que el gobierno de la nación, en manos del PP, haya hecho la Reforma Laboral mas abusiva contra los trabajadoreos y trabajadoras de la historia reciente. Lo que nos ha obligado, como no podria ser de otra manera, a destinar nuestros recursos y esfuerzos a sumarnos a la lucha sindical, a apoyar cuantas acciones y manifestaciones se han sucedido a lo largo del mes, incluyendo la huelga general del día 29.

Y por si no estabamos ocupadas en la lucha, el PP decide recortar los pocos programas de ayuda a mujeres víctimas de la lacra mas vergonzante de nuestra sociedad: La violencia de género, y recorta las ayudas a la dependencia, que alivian la carga de muchas mujeres, y nos someten a un bombardeo mediatico, con la iglesia de fondo, para remodelar el "perfil de la española", que con o sin mantillas pudimos desdibujar un poco.

Un perfil femenino aberrante que llevan en la mente los dirigentes populares, y que se va percibiendo en declaraciones del tipo de las del ministro Gallardon... impresentable!

No ha sido un buen mes para el tema de las mujeres especificamente, pero si que ha sido una buena oportunidad para incrementar nuestra presencia en las calles, en las acciones revindicativas, en la información, en todos los ambientes nuestra presencia ha sido notable, incluso, a veces, brillante.

El año proximo procuraremos retomar el tema de las propuestas del feminismo y sus revindicaciones.

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A mis compañeros y compañeras del Psoe

Asistí a una reunión en la Agrupación Alesto que me ha fortalecido el ánimo, fuí a escuchar al Presidente de la Gestora del Psoe de Sevilla, Manuel Gracia Navarro, compañero al que me siento con el privilegio de conocer hace muchos años, desde que inició su andadura como Consejero de Educación, allá por los años ochenta, y me permito compartir con vosotros mi reflexión posterior. 

Estamos a tres semanas de las Elecciones en Andalucía, con la "espada de Damócles encima", con el "corazón en un puño" porque el Psoe de Sevilla, referente desde siempre por sus resultados,  tiene este reto añadido. Conociendo a los sevillanos se puede afirmar que están muy afectados por ello, pues los últimos acontecimientos acaecidos que culminan con la dimisión del Secretario General, han destapado la caja y han visto la luz asuntos que han ido lastrando nuestra normal andadura.

Hay un gran cúmulo de egos y egas, heridos unos y otras, que conviven con sus fantasmas, ocultando sus intenciones y otro grupo importante luchando a dentelladas por el puro poder.  Se ha removido el fondo y se han alterado los posos.

Está cambiando la configuración de la organización, se mueve, imperceptiblemente por ahora,y se percibe el acuerdo tácito de aplazar las cuitas internas al día 26 de marzo, "sea cual fuere el resultado", como dijo Manuel Gracia.

Me atrevo a pediros, como hizo él a los presentes, un esfuerzo compañeras y compañeros, vamos a intentarlo, vamos a ganar, vamos a cumplir con el Partido, vamos a respetar nuestras siglas y a juntar nuestros esfuerzos para ganar las elecciones, porque en caso contrario perdemos todos, sobre todo los que confian en nosotros y no les queda otro recurso para luchar por sus derechos, que son los más desfavorecidos de la sociedad, y los y las trabajadores, parados o no, da igual.

Y nos emplazamos al 26, para aún celebrando el éxito, seamos coherentes y arreglemos nuestra casa y abramos las puertas y ventanas para renovar el aire y corregir errores.

Un abrazo.